Por las casas de colores del alma de Fernando Pessoa

Lisboa y sus casas de colores, es una frase de Fernando Pessoa en uno de sus poemas. Lisboa y sus casas de colores, fue algo que conocí con mis propios ojos. Comparada con otras ciudades europeas podría decirse que esta es una ciudad de menores atractivos, no cuenta con grandes edificios, más bien tiene una singularidad en su arreglo arquitectónico que no podría compararse fácilmente con otros sitios. Sus casas de colores, contrastan con lo que se observa en otras ciudades europeas, meticulosamente diseñadas y de colores uniformes, grises o cafés. Lisboa es un arcoiris hecho de pequeñas fachadas, en tonos pasteles, casitas azules, rosas, amarillas, blancas, verdes y violetas.



Autor: Mónica Márquez. 2010.


Estas son las mismas casas que Pessoa miró dia a dia, hasta la monotonía, porque la ciudad natal se conoce palmo a palmo y lo único que él veía después de sus largas introspecciones eran esas casas de colores.


"Lisboa con sus casas de varios colores,
Lisboa con sus casas de varios colores,
Lisboa con sus casas de varios colores......
A fuerza de tanta diferencia esto es monótono,
como, a fueza de sentir, solo me queda pensar.
Si de noche, acostado y despierto en la inutil lucidez de no poder dormir,
quiero imaginarme alguna cosa pero siempre surge otra (porque tengo sueño, y porque tengo sueño tengo un poco de ensueño),
quiero extender esta mirada con la que imagino hasta los grandes palmares fantásticos,
no veo nada más,
sobre una especie de lado dentro de los párpados,
que Lisboa con sus casas de varios colores.
Sonrio porque aquí, acostado, eso es ya otra cosa.
A fuerza de monotonía es diferente.
Y a fuerza de ser yo, duermo y me olvido que existo.
Queda sola sin mí,que olvido porque duermo,
Lisboa con sus casas de varios colores".

Lo bello cansa se podría decir, pero yo diré otra cosa, Pessoa le debe mucho a las casas de varios colores de Lisboa, porque es un paisaje en el que la luz del cielo en el atardecer es única y ofrece una conjunción de colores arrebolados en las nubes y colores pasteles en las casitas; esto crea un espectáculo irrepetible que despierta las emociones más profundas. La belleza allí es una idea más compleja, es esta conjunción, que ahora involucra a cada ser que se detiene a ver esto. Cada día estaba ante un espectáculo irrepetible del despertar de las emociones más íntimas. Esa luz evoca recuerdos, emociones, sentimientos, una tormenta en el espíritu te lleva desde la melancolía al placer del presente, desde la sonrisa hasta el deseo de llorar, desde la alegria desbordante hasta el dolor de ver que esta hermosa estampa se escapa rapidamente en los últimos minutos del día.

Autor: Mónica Márquez. 2010.

Esta belleza lo inunda todo en el alma, corroborado en la misteriosa belleza de la persona de "Pessoa", o lo que es lo mismo, "la persona". Una de esas casas de colores es ahora la "Casa Fernando Pessoa", en la Rua Coelho de Rocha, 16. Desde la fachada remodelada, escrita de punta a punta con poemas del escritor, se interna el alma en otra dimensión. A la entrada en el piso, la carta astral (natal) de Pessoa, el sonido de las teclas de un piano en una melodía básica inunda las paredes blancas de emociones, que a su vez están inundadas de letras, porque las letras son un vehiculo para expresar las emociones, pero estas están más allá de las palabras, en las paredes de una casa, en los objetos personales, en sus pequeños lentes circulares, o en la máquina personal del escritor.

Autor: Mónica Márquez. 2010.

Un funcionario de la institución, con la característica amabilidad y calidez de los habitantes de esta ciudad Portuguesa, más cercana a la que se encuentra en los latinos que a lo hallado en los europeos, me lleva a uno de los espacios más escondidos del lugar, que resulta enteramente esotérico. En una pared ubicada en la parte trasera de la casa están las cartas natales de los heterónimos de Pessoa, una a una, y la mismisima carta astral de Lisboa.

"Cuanto fui y no fui, todo eso soy.
Cuanto quise y no quise, todo eso me forma.
Cuanto amé o dejé de amar es en mí la misma saudade".

La idea de que en una vida se pueden vivir muchas vidas, es la idea de Pessoa, pero para él esto era un paso a la perfección a la completud del ser, como él mismo lo expresa en uno de sus poemas.

Autor: Mónica Márquez. 2010.



En un rincón de la pared este maravilloso funcionario, me muestra la transcripción de la palabra mensangen, el título de la colección de poemas considerada la mas esotérica y enigmatica del poeta.

Mensagem, es la contracción de una frase enigmática que Pessoa resumió como "mente agita la materia", la mente transforma la materia. Eso es para pensar, para pensar toda la vida...

Autor: Mónica Márquez. 2010.